Los trastornos alimentarios (TCA), son un conjunto de enfermedades mentales que se caracterizan por una alteración en la conducta alimentaria, provocando una preocupación excesiva por el peso, la forma corporal afectando, por supuesto, todo lo que se ingesta. Los TCA pueden tener un impacto devastador en la vida de las personas que los padecen y sus familiares. Se caracterizan por alteraciones graves en las conductas alimentarias, que pueden tener graves consecuencias físicas y mentales, como desnutrición, problemas cardíacos, osteoporosis, depresión y ansiedad. También pueden conducir a problemas sociales, como el aislamiento y la dificultad para mantener relaciones.
Las personas con TCA a menudo luchan contra pensamientos y sentimientos negativos sobre su cuerpo, imagen y peso. Pueden sentirse atrapadas en un ciclo de culpa, vergüenza y autodestrucción.
Según la Asociación Nacional de Trastornos de la Alimentación (ANAD), en España, una de cada diez personas sufrirá un trastorno alimentario a lo largo de su vida. La edad de inicio más frecuente es entre los 12 y los 25 años, pero también pueden aparecer en edades más tempranas o más tardías. En Estados Unidos, David Tedrow, un jubilado de 60 años, todas las noches se cansaba de dar vueltas en la cama y se dirigía a la cocina para comerse una caja de cereal completa a las 2:00 a.m. Siempre tuvo la tendencia a comer de esta manera, pero cuando se dio cuenta que consumía una caja completa diariamente y que esto se traducía a los atracones, decidió buscar ayuda.
Los trastornos alimentarios más comunes son la anorexia nerviosa, la bulimia nerviosa y el trastorno por atracón.
Alerta ante los síntomas
Los síntomas de los trastornos alimentarios pueden variar según el tipo de trastorno, pero algunos de los más comunes son:
• Cambios en el peso corporal
• Alteraciones en la imagen corporal
• Restricción de la ingesta de alimentos
• Atracones
• Comportamientos compensatorios
• Cambios en el estado de ánimo
• Problemas en las relaciones personales
• Dificultades en el ámbito académico o laboral
Consecuencias de los trastornos alimentarios
Los trastornos alimentarios pueden tener graves consecuencias físicas y psicológicas, tanto a corto como a largo plazo.
Entre las consecuencias físicas más comunes se encuentran:
• Problemas nutricionales
• Alteraciones en el ciclo menstrual
• Problemas gastrointestinales
• Osteoporosis
• Problemas cardiacos
• Problemas renales
• Depresión
• Ansiedad
• Trastornos de personalidad
• Ideas suicidas
Cómo detectar los trastornos alimentarios
Según el National Institute of Mental Health (NIMH), es importante mantenerse atento a las siguientes señales:
• Ten en cuenta que los trastornos de la alimentación son más comunes en las mujeres que en los hombres, pero también afectan a los hombres. Asimismo, si bien es más común en edades tempranas, puede empezar en cualquier edad.
• Presta atención a los cambios físicos, como la pérdida de peso repentina, los cambios en el ciclo menstrual o los problemas gastrointestinales.
• Los trastornos de la alimentación se caracterizan por alteraciones graves de las conductas alimentarias, como la restricción de la ingesta de alimentos, el atracón y la purga.
• Fíjate en los cambios en el estado de ánimo y conductas, como la ansiedad, la depresión o la irritabilidad.
Si detectas alguno de estos signos de alarma, es importante hablar con un profesional de la salud para que pueda realizar una evaluación adecuada.
Tratamiento de los trastornos alimentarios
El tratamiento de los trastornos alimentarios es complejo y requiere un enfoque multidisciplinar. Suele incluir terapia psicológica, terapia nutricional y, en algunos casos, medicación.
La terapia psicológica ayuda a las personas a abordar los problemas subyacentes que contribuyen al trastorno alimentario, como la baja autoestima, la ansiedad o la depresión.
La terapia nutricional ayuda a las personas a aprender a comer de forma saludable y a recuperar un peso saludable, sin sentirse culpable.
En algunos casos, se puede recetar medicación para ayudar a controlar los síntomas de ansiedad o depresión.
Prevención de los trastornos alimentarios
No existe una forma segura de prevenir los trastornos alimentarios. Es importante recordar que los TCA no son una elección. Son enfermedades reales que requieren tratamiento. Existen algunas cosas que se pueden hacer para reducir el riesgo.
• Fomentar una imagen corporal positiva.
• Educar a los jóvenes sobre los trastornos alimentarios.
• Promover la salud mental y el bienestar.
• Pedir ayuda, no te encuentras solo y no hay de qué avergonzarse.
Si usted o alguien a quién conoce sufre de algún trastorno de la conducta alimentaria, en Fénix Salud contamos con excelentes profesionales que pueden guiarlo a una mejora y cuidado correcto de su salud.