El dolor de oído en los niños es una de las afecciones más comunes. Se estima que hasta el 75% de los niños experimentan una infección de oído al menos, una vez antes de los tres años de edad.
El dolor de oído puede ser causado por una infección bacteriana o viral, una acumulación de líquido en el oído medio o una lesión en el oído. Los síntomas más comunes son:
- Dolor intenso en uno o ambos oídos
- Fiebre
- Dificultad para dormir
- Llanto o irritabilidad
- Dificultad para escuchar
Es sumamente importante que, si bien es una enfermedad muy común en los niños, se trate de manera adecuada y no se administren medicamentos sin supervisión médica.
¿Qué hacer para calmar su desesperación?
Mientras esperas a la cita con el médico, hay algunas cosas que puede hacer para ayudar a aliviar el dolor de oído de su hijo:
- Aplicar una compresa caliente en el oído afectado. Esto puede ayudar a reducir la inflamación y el dolor.
- En caso de tratarse de acumulación de líquido, levanta la cabeza del pequeño mientras duerme. Esto puede ayudar a que el líquido drene del oído medio.
Llame a su pediatra si:
- Su hijo tiene fiebre de más de 38 grados centígrados.
- Su hijo tiene otros síntomas, como náuseas, vómitos o dificultad para respirar.
Prevén cualquier infección:
- Amamantar a su hijo durante al menos seis meses. La leche materna proporciona anticuerpos que pueden ayudar a proteger a los niños de infecciones.
- Mantenga a su hijo alejado del humo del cigarrillo. El humo del cigarrillo puede aumentar el riesgo de infecciones de oído.
- Enséñele a su hijo a sonarse la nariz correctamente. Esto puede ayudar a prevenir que el líquido se acumule en el oído medio.
- Evitar la limpieza de sus oídos con hisopos.
- Evitar que introduzcan objetos, como juguetes, en sus oídos.