Carlitos tiene seis años. Le encanta colorear y también le encanta visitar jugueterías con sus padres, porque allí puede conseguir su mayor pasión: los dinosaurios.
Como cualquier niño, un día siente malestar. Un poco de congestión nasal, tos y quebranto. Su mamá, primeriza y preocupada, le dice que deben ir corriendo a la juguetería. Carlitos, emocionado, olvida el malestar y deja que su mamá lo aliste. Obviamente, un viaje a la juguetería le haría sentir mejor. Carlitos sabe en cuál juguetería de Caracas encuentra los mejores y más feroces dinosaurios; curiosamente al lado del consultorio de su pediatra.
Ya sabrás a cuál “juguetería”, realmente, llevaban a Carlitos.
Los niños son más propensos a enfermarse que los adultos, ya que su sistema inmunitario aún está en desarrollo. Las enfermedades más comunes en los niños suelen ser leves y se curan por sí solas, en tan sólo unos pocos días. Sin embargo, es importante estar atento a los signos y síntomas de enfermedades más graves y consultar a un médico si es necesario.
Cada 20 de enero, en Venezuela celebramos a aquellos que no sólo velan por el bienestar de los más pequeños, sino que tranquilizan y brindan herramientas a los más grandes para cuidar de sus hijos.
Sin embargo, los padres y cuidadores desempeñan un papel importante en la promoción de hábitos saludables en los niños. Por ello, es tan importante que sean partícipes en el bienestar del pequeño, proporcionando alimentos saludables y oportunidades para hacer ejercicio, y enseñando a los niños sobre la importancia de la higiene y la salud.
Entonces, ¿cómo prevenir las enfermedades en los niños?
- Cumple con su control de vacunación.
- Enséñales a lavarse las manos con frecuencia.
- Mantenlos alejados de focos y espacios infecciosos.
- Anímalos a ejercitarse y hacer alguna actividad física.
- Mantenlos hidratados, así como que adquieran el gusto por el agua y jugs naturales.
- Procura su higiene dental.
- Limita el tiempo de aparatos electrónicos.
- Anímalo a que comparta con otros niños de su edad.
- Fomenta su lectura.
- Que exprese sus emociones.
Si promovemos rutinas sanas en los niños, estas se volverán hábitos que podrán ayudarlos a tener una vida más feliz y saludable. Como padre, sé cómplice de los especialistas para su bienestar: escúchalos, sé flexible cuando debas serlo y protege a tus hijos.
A nuestros pediatras, sólo queda agradecerles y desearlas un muy buen día. Carlitos se los agradecerá en el futuro.
