Actualmente vivimos en un mundo acelerado y muchas veces se nos hace fácil quedarnos atrapado en el ajetreo y el estrés de la vida cotidiana. Nuestras mentes están constantemente llenas de pensamientos sobre lo que sigue en nuestra lista de tareas pendientes, lo que debemos lograr y lo que debemos hacer para tener éxito. Sin embargo, tomarse un momento para practicar la atención plena puede tener un impacto profundo en nuestra salud mental, salud física y bienestar general.

¿Qué es el mindfulness?

El Mindfulness o la atención plena, es una práctica que consiste en llevar toda nuestra atención al momento presente sin juzgar. Esto significa estar completamente presente y consciente de lo que está sucediendo en el momento, sin quedar atrapado en pensamientos sobre el pasado o el futuro. La atención plena a menudo se asocia con la meditación, pero también se puede practicar mientras caminamos, comemos o incluso nos cepillamos los dientes.

Beneficios

Entre los beneficios que nos trae practicar el mindfulness o la atención plena se encuentran:

Reduce el estrés y la ansiedad

Mejora nuestra concentración y el enfoque

Brinda mayor autoconciencia

Mejora de la regulación emocional

Aumenta la sensación de bienestar y felicidad

¿Cómo puedo practicar el mindfulness o la atención plena?

Hay muchas maneras de practicar la atención plena, pero el método más simple y común es a través de la meditación. En Centro Clínico Fénix Salud, te dejamos un pequeño ejercicio para adentrarte al mundo de la atención plena.

Paso 1

Para comenzar con la meditación de atención plena, debemos buscar un lugar tranquilo donde podamos sentarnos cómodamente durante unos minutos.

Paso 2

Cierra los ojos y concéntrate en tu respiración. Nota como la sensación del aire entra y sale de tu cuerpo. Cuando la mente divague, llévela suavemente de regreso a tu respiración.

Trata de practicar esto durante unos minutos todos los días, aumentando gradualmente la cantidad de tiempo que dedica a la meditación.

Además de la meditación, puedes practicar la atención plena durante las actividades cotidianas. Por ejemplo, cuando estés comiendo, tómate el tiempo para saborear cada bocado y notar los sabores y texturas de la comida. También puedes intentarlo cuando estés caminando, presta atención a la sensación de tus pies en el suelo y al movimiento de tu cuerpo. Hacer estas pequeñas cosas te ayudará a vivir en el presente y conectarte con mucho más con tu yo interior.

Consejos para incorporar la atención plena en tu vida diaria

La meditación es una excelente manera de practicar la atención plena, pero existen otras formas de incorporar la atención plena en tu rutina diaria. Aquí te dejamos algunos consejos que te ayudaran a comenzar:

1. Comienza tu día con intención: respira profundamente antes de levantarte de la cama y establece una intención para el día.

2. Practica la respiración consciente: tómate unos minutos a lo largo del día para concentrarte en tu respiración, notando como la sensación del aire entra y sale de tu cuerpo.

3. Activa tus sentidos: cuando realices actividades cotidianas como ducharte o cocinar, presta atención a las imágenes, los sonidos, los olores, los sabores y las texturas que te rodean.

4. Tómate un descanso: cuando te sientas abrumado o estresado, tómate unos minutos para alejarte de lo que estás haciendo y concéntrate en tu respiración. 

5. Practica la gratitud: tómate un momento cada día para reflexionar sobre las cosas por las que estás agradecido, sin importar cuán pequeñas puedan parecer.

Al incorporar la atención plena en su vida diaria, puedes experimentar los beneficios de la atención plena incluso cuando no estés meditando activamente. 

La atención plena es una práctica simple pero poderosa que puede tener un impacto significativo en su salud mental y física. Al tomarnos unos minutos cada día para concentrarnos en el momento presente, nos ayuda a reducir el estrés, mejorar el enfoque y la concentración, y aumentar los sentimientos de bienestar y felicidad. 

Volver al Inicio

 

Share This